Si.. yo se que estĆ” sencillo... pero este lo pidieron por ahĆ... asĆ que lo tracĆ© ;)
Vector Editable
se sube e PDF
Relato bĆblico En el libro de GĆ©nesis, un arcoĆris simbolizĆ³ la alianza de Dios con NoĆ© y su promesa de que no destruirĆ” la Tierra con un diluvio otra vez. SegĆŗn el Antiguo Testamento, el arcoĆris fue creado por Dios tras el Diluvio universal. En el relato bĆblico, este aparecerĆa como muestra de la voluntad divina y para recordar a los hombres la promesa hecha por el propio Dios a NoĆ© de que jamĆ”s volverĆa a destruir la tierra con un diluvio.
Mi arco he puesto en las nubes, el cual serĆ” por seƱal del pacto entre mĆ y la tierra. Y sucederĆ” que cuando haga venir nubes sobre la tierra, se dejarĆ” ver entonces mi arco en las nubes. Y me acordarĆ© del pacto mĆo, que hay entre mĆ y vosotros y todo ser viviente de toda carne; y no habrĆ” mĆ”s diluvio de aguas para destruir toda carne. GĆ©nesis 9:13-15. Biblia Reina-Valera, 1960
Por este motivo tambiĆ©n el arcoĆris es el sĆmbolo moderno del movimiento NoĆ”jida ya que simboliza el pacto que Dios hizo con Noaj (NoĆ©) y su descendencia para siempre, el cual tendrĆa su mĆ”xima expresiĆ³n en el cumplimiento de las siete leyes de los hijos de Noaj.
Historia de la ciencia del arcoĆris
Es un arco compuesto de arcos concĆ©ntricos de colores, sin soluciĆ³n de continuidad entre ellos, con el rojo hacia la parte exterior y el violeta hacia el interior.El 13 de octubre pasado, un pasajero se disponĆa a viajar desde Chicago hacia Miami en un vuelo que partiĆ³ desde el aeropuerto O'Hare. Como habĆa caĆdo una tenue lluvia y habĆa humedad en el ambiente, en el aeropuerto apareciĆ³ en arcoiris. Una vez que el aviĆ³n levantĆ³ vuelo, al observar el colorido fenĆ³meno desde el aire, el pasajero "descubriĆ³" que no se trata de un "arco", sino de un "cĆrculo" contentivo de la descomposiciĆ³n cromĆ”tica descrita. Adicionalmente, el pasajero notĆ³ que el "cĆrculoĆris" no es un fenĆ³meno estĆ”tico, sino que cambia de posiciĆ³n a medida que nos acercamos o nos alejamos de Ć©l.
Colores del espectro visible. Menos frecuente es el arcoĆris doble, el cual incluye un segundo arco mĆ”s tenue con los colores invertidos, es decir, el rojo hacia el interior y el violeta hacia el exterior.
Si bien el arcoĆris es un gradiente continuo de colores espectrales, se considera que estos pueden definirse en siete colores fundamentales: rojo, naranja, amarillo, verde, cian, azul y violeta, los cuales equivalen a los mencionados por el cientĆfico Isaac Newton en 1704 (rojo-naranja-amarillo-verde-azul-aƱil-violeta, respectivamente).
En el sistema RGB, que es un modelo de colores luz, corresponde a tres colores primarios, dos secundarios y dos terciarios.
Historia de la ciencia del arcoĆris ArcoĆris doble. Hace mĆ”s de tres siglos, Isaac Newton logrĆ³ demostrar con ayuda de un prisma que la luz blanca del Sol contiene colores partiendo del rojo, a su vez pasando por el naranja, amarillo, por el verde, por el azul y aƱil hasta llegar al violeta. Esta separaciĆ³n de la luz en los colores que la conforman recibe el nombre de descomposiciĆ³n de la luz blanca.
ArcoĆris en Losar de la Vera, CĆ”ceres, EspaƱa, abril de 2012. El experimento de Newton no es difĆcil de reproducir, pues no es necesario contar con instrumental cientĆfico especial para llevarlo a cabo. Incluso hoy en dĆa resulta ser uno de los mĆ”s hermosos e instructivos para los principiantes estudiantes de Ć³ptica en educaciĆ³n bĆ”sica, media y superior.
Se puede lograr con un prisma, el cual, al ser atravesado por un rayo de luz blanca del sol, hace que el rayo de luz solar se refracte y salga por el lado opuesto descompuesto en los siete colores ya mencionados.
Pero muchos siglos antes de que naciera Newton la naturaleza ya habĆa descompuesto la luz del Sol una y otra vez ante los ojos de nuestros antepasados. Algunas veces, despuĆ©s de una llovizna; otras, una tormenta. Lo cierto es que el arcoĆris fue durante mucho tiempo un fenĆ³meno tan asombroso como sobrecogedor. Tomado en ocasiones como portador de augurios, en otras como inspiraciĆ³n de leyenda, y siempre como una obra de arte, nunca ha dejado de parecer maravilloso al ser humano.
La teorĆa completa del arcoĆris fue, sin embargo, anterior a Newton: en la Edad Media Teodorico de Freiberg proporcionĆ³ una de las primeras teorĆas acerca de la naturaleza del arco iris, luego desarrollada por Antonius de Demini en 1611, fue retomada y refinada luego por RenĆ© Descartes.
Posteriormente, la teorĆa moderna fue propuesta en forma inicial por Thomas Young y, mĆ”s tarde elaborada en detalle por Richard Potter y George Biddell Airy.
Explicaciones sobre el fenĆ³meno
Cuando la luz solar incide sobre las gotas de lluvia, estas se encargan de producir del efecto, pero en algunas mucho mĆ”s que en otras. Los rayos del Sol involucrados con la formaciĆ³n del arcoĆris salen de las gotas de lluvia con un Ć”ngulo de aproximadamente 138 grados respecto de la direcciĆ³n que llevaban antes de entrar en ellas.Este es el «Ć”ngulo del arcoĆris», descubierto por RenĆ© Descartes en el aƱo de 1637. Como el Ć”ngulo de salida es de solo 138 grados, la luz no se refleja exactamente hacia su origen. Esto hace posible que el arcoĆris sea visible para nosotros, que no solemos encontrarnos exactamente entre el Sol y la lluvia. De manera que siempre, si nos colocamos de frente a un arcoĆris, el Sol estarĆ” detrĆ”s de nosotros. Para ser mĆ”s precisos, es la luz amarilla la que es dispersada a 138 grados de su trayectoria original. La luz de otros colores es dispersada en Ć”ngulos algo distintos. La luz roja del arcoĆris se dispersa en una direcciĆ³n ligeramente menor que 138 grados, mientras que la luz violeta sale de las gotas de lluvia en un Ć”ngulo un poco mayor.
Un rayo de luz solar, de los que forman un arcoĆris, cambia su direcciĆ³n tres veces mientras se mueve a travĆ©s de una gota de lluvia: Primero entra en la gota, lo cual ocasiona que se refracte ligeramente. Entonces se mueve hacia el extremo opuesto de la gota, y se refleja en la cara interna de la misma. Finalmente, vuelve a refractarse cuando sale de la gota de lluvia en forma de luz dispersa. La descomposiciĆ³n en colores es posible porque el Ćndice de refracciĆ³n de la gota de agua es ligeramente distinto para cada longitud de onda, para cada color del arcoĆris.
La luz solar emerge de muchas gotas de lluvia a un tiempo. El efecto combinado es un mosaico de pequeƱos destellos de luz dispersados por muchas gotas de lluvia, distribuido como un arco en el cielo. Los diversos tamaƱos y formas de las gotas afectan la intensidad de los colores del arcoĆris. Gotas pequeƱas hacen un arcoĆris pĆ”lido y de colores con tonalidades pastel; gotas grandes producen colores muy vivos. AdemĆ”s, las gotas grandes son aplastadas por la resistencia del aire mientras caen. Esta distorsiĆ³n ocasiona que el "final" del arcoĆris tenga colores mĆ”s intensos.
QuizĆ”s sea esta la causa de la leyenda que sugiere la existencia de una olla que contiene oro resplandeciente en el final del arcoĆris. A veces, es posible ver tambiĆ©n lo que se conoce como arcoĆris secundario. El arcoĆris primario, que hemos dado en llamar simplemente "arcoĆris", es siempre un arco interior y mĆ”s prĆ³ximo al observador que el arcoĆris secundario.
Si la luz que incide sobre la gota de agua realiza al menos dos refracciones y tres reflexiones internas podemos deducir su trayectoria. El resultado es la formaciĆ³n de un arcoĆris secundario de colores invertidos, mĆ”s dĆ©bil y que queda por encima del primario. Su debilitamiento se debe a la luz que se refracta y sale al exterior en cada reflexiĆ³n interna.
Los Ć”ngulos que forman los rayos incidente y refractado hacia el ojo son mayores en el rayo secundario: 50° para la luz roja y 54° para la violeta. Vimos que en la formaciĆ³n del primario, el Ć”ngulo era de 132° para la luz roja, esto es, 42° respecto al observador. El orden de los colores en el arco secundario estĆ” invertido debido a la doble reflexiĆ³n interna. TeĆ³ricamente puede haber mĆ”s de tres reflexiones internas, que darĆan lugar a cuatro y cinco arcos iris.
El tercero y cuarto estarĆan entre el observador y el sol y quizĆ”s nunca se puedan ver. El quinto se produce en la misma zona del primero y del segundo y no es perceptible porque es muy tenue. Es posible, en un experimento de laboratorio, demostrar que se pueden conseguir hasta 13 arcos iris visibles, aunque, lĆ³gicamente su luminosidad se reduce considerablemente.
Es interesante seƱalar que ninguna luz emerge en la regiĆ³n entre los arcos iris primario y secundario. Esto coincide con algunas observaciones, que seƱalan que la regiĆ³n entre los dos arcos es muy oscura, mientras que en la parte exterior del arco secundario y en la parte interior del arco primario es visible una considerable cantidad de luz, lo cual se debe al reflejo de la luz blanca concentrada justo antes de su refracciĆ³n para formar el arcoĆris. Esta zona oscura intermedia se debe a la intensidad de la cortina de agua, que absorbe toda la luz posible hacia el interior de la misma, por lo que el arco secundario es simplemente un reflejo del primario en direcciĆ³n hacia el observador y es conocida como "Banda de Alejandro".[cita requerida] En algunas ocasiones, cuando los arcos iris primario y secundario son muy brillantes, se puede observar un tercero dentro del primario y un cuarto fuera del secundario. A estos arcos se les llama arcos supernumerarios y se deben a efectos especiales de interferencia luminosa. Cuando alguien mira un arcoĆris, lo que estĆ” viendo en realidad es luz dispersada por ciertas gotas de lluvia.
Otra persona que se encuentre al lado del primer observador verĆ” luz dispersada por otras gotas. De manera que puede decirse que cada quien ve su propio arcoĆris, distinto (hablando en un sentido estricto) del que ven todos los demĆ”s. Es comĆŗn pretender estimar la posiciĆ³n del arco, especialmente sus "extremos", es decir, allĆ donde desaparece por no existir gotas que descompongan la luz. Pero el arco iris es, en realidad, un cono iris: todas las gotas situadas en la misma posiciĆ³n respecto del espectador y del sol descomponen la luz de igual manera. Si existen solamente gotas lejanas, en espectador tendrĆ” la percepciĆ³n de que el arco se encuentra en una posiciĆ³n determinada. En cambio, si unas gotas se encuentran prĆ³ximas y otras alejadas, el espectador percibirĆ” que la situaciĆ³n del arco es indeterminada. Si las condiciones atmosfĆ©ricas y el sitio de observaciĆ³n son perfectos, entonces la lluvia y el Sol trabajan juntos para crear un anillo de luz completo, denominado arcoĆris circular, como el que se vio el 6 de agosto de 2007 en la isla de Langkawi, Malasia.
En los arcoĆris normales el rojo es el color exterior, y el violeta el interior, pero en los circulares la variaciĆ³n es la contraria. Respecto de las condiciones para ver un arcoĆris se reducen a que el observador tiene que estar localizado entre el sol y una lluvia de gotas esfĆ©ricas (una lluvia uniforme). Es posible que el observador crea que la lluvia no es uniforme donde Ć©l se encuentra, pero sĆ debe serlo desde donde localizarĆa el arcoĆris. ¿Y cuĆ”ndo son las gotas esfĆ©ricas? Las gotas son esfĆ©ricas cuando caen a una velocidad uniforme, constante. Esto es posible en condiciones de aceleraciĆ³n gravitatoria contando con las fuerzas viscosas de oposiciĆ³n del aire. Cuando se cumple que la velocidad de las gotas es uniforme, la gota adquiere un volumen mĆ”ximo con la mĆnima superficie (esfera). solo en estas condiciones es posible la dispersiĆ³n luminosa dentro de la gota y por tanto el arcoĆris, aunque ligeras variaciones de la esfera puedan dar diversas variaciones en un arcoĆris. Por lo tanto, la lluvia no debe ser torrencial, ni estar afectada por el viento. Es por ello que no siempre se contempla el arcoĆris cuando hay lluvia y sol. Es importante notar la altura del Sol cuando uno observa un arcoĆris, pues es algo que ayuda a determinar quĆ© tanto alcanza uno a ver de Ć©l: cuanto mĆ”s bajo se encuentre el Sol, mĆ”s alta serĆ” la cresta del arcoĆris y viceversa. Alguien que pueda elevarse un poco sobre la superficie de la Tierra, se darĆa cuenta de que ciertos arcoĆris continĆŗan por debajo del horizonte.
Quienes escalan montaƱas altas han logrado ver en ocasiones una buena parte de arcoĆris circulares completos. Pero ni siquiera las montaƱas poseen la suficiente altura como para poder llegar a observar un arcoĆris circular en su totalidad. Los aviadores han informado algunas veces haber visto genuinos arcos iris circulares completos, los cuales curiosamente han pasado inadvertidos para los pasajeros de sus aeronaves. Esto puede deberse a que las ventanas de los viajeros son muy estrechas y ofrecen un campo de visiĆ³n muy reducido, a diferencia del impresionante campo visual que tiene el piloto.